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Necropolis de OSTIPPO

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Ciudad

Síntesis Funeraria

Los datos más importantes proceden de la excavación arqueológica de la calle Mirasierra, realizada en 2007, cuarenta años después de las primeras intervenciones de la década de los años '60 del pasado siglo, cuando fueron localizados y abiertos otros cuatro enterramientos.

Monumentos

Es de destacar un edificio identificado como Basílica, del que se conserva su pila bautismal, en torno al cual se depositaron varios enterramientos de inhumación de cronología romana cristiana tardía.

Tipologías Sepulcrales no Monumentales

Se reconocen enterramientos en fosa simple, a través de la Fase III de la intervención en calle Misarierra, fase que se vincularía con una necrópolis de tradición romano cristiana que dispone sus enterramientos en función de la iglesia. Aunque los procesos postdeposicionales dificultan tanto el establecimiento de criterios temporales absolutos cuanto relaciones dentro-fuera con respecto al recinto, parece que alguna de las tumbas estaría dentro del espacio principal, y algunas, desde luego, en torno a la piscina bautismal. Nada impide, por tanto, que al menos parte de las tumbas fueran coetáneas de la basílica. La mayoría de las tumbas están excavadas en el sustrato geológico, encajadas mediante cuñas de piedra. Una más, también de una sola pieza, es una pila reutilizada que conserva los canales de desagüe. Las seis siguientes están elaboradas con grandes lajas de piedra caliza o arenisca, con el fondo del mismo material o de ladrillo. Todas ellas se cubren con dos o tres grandes y pesadas losas de caliza. Finalmente hay dos tumbas excavadas mediante una fosa directamente sobre el sustrato geológico. Ambas conservaban parte de su relleno original, una con tierra, la otra con piedras y cascotes de tegulae y ladrillos. Los ajuares muestran elementos típicamente tardorromanos - visigodos, como una placa de cinturón o jarritas cerámicas 
De las nueve tumbas con el registro íntegro (cuatro fueron abiertas en 1964), sólo dos tienen inhumaciones primarias de individuos adultos masculinos, de un total de 18 individuos. Del resto, lo más común es un enterramiento primario femenino sobre otro anterior del mismo sexo.  El procedimiento siempre es el mismo: cuando se va a depositar el segundo cuerpo, se recogen los restos anteriores y se disponen a los pies de la tumba; el cráneo, sin embargo, se coloca junto la cabeza del nuevo. En un caso se suma a este ritual la presencia de un inhumado infantil, también removido, y en otro la de los restos de un feto a término. Sólo una de las tumbas, la que está contigua a la piscina bautismal, contiene los restos de dos enterramientos infantiles secundarios. La esperanza media de vida en la población adulta casi alcanza los 39 años, algo mayor en los escasos sujetos masculinos y menor en los adultos femeninos.

Ajuares

Básicamente jarras cerámicas y alguna hebilla de cinturón de época tradorromana-visigoda.

Enterramientos Singulares

En 1991, en la Calle Saladillo se localizó un enterramiento en sarcófago de plomo, de  41 cm de alto, entre 45 y 48 cm de ancho y una longitud conservada de 1.1 0 m  y en cuyo exterior aparecieron 13 piezas de ajuar (cerámico y vítreo)  y 5 más en el interior de la caja. (Juárez 1992 b).

Enterramientos Singulares Nivel II (0)

Escultura Funeraria

De Ostippo proceden algunos fragmentos de escultura de factura muy parecida a los famosos “relieves de Osuna” (Hernández, Sancho y Collantes, 1954, 31, fig. 38; Blázquez, 2002, 697), configurados para situarse en la base de estructuras posiblemente funerarias (León, 1998, 103). Nos referimos a una figura varonil con túnica corta, dos guerreros con gladii y un león cabalgado por un personaje masculino, del que únicamente se conserva el cuerpo cubierto con cota de malla y el brazo izquierdo que se agarra a la melena del animal (Blázquez, 2002, 697 ss.; Beltrán Fortes, 2002, 239).

Epigrafía Funeraria

De gran interés es la inscripción hallada en la C/ Médico Ruiz, donde apareció un muro formado a base de grandes sillares, uno de los cuales era, en realidad, un gran cipo que incluía el epitafio del liberto M. Rutilius Diomedes (Juárez Martín, 1993a, 521).

Estudios Antropológicos

Cronología de la Necrópolis

Repertorio de Consulta

-	Beltrán, J.
(2002), “La arquitectura funeraria en la Hispania meridional durante los siglos II a.C. – I d.C.”, Espacios y usos funerarios en el Occidente Romano, Córdoba, 233-258.
(2009a): “Precedentes”, en P. León (Coord.), Arte romano de la Bética. Escultura, Sevilla, 17-39.
- Beltrán, J.; García, M.A. y Rodríguez, P. (2007), Los sarcófagos romanos de Andalucía. Corpus Signorum Imperii Romani. España, I.3, Murcia.
-	Blázquez, J. M. (2002), “Astapa, Ostippo (Estepa) en época romana”, V Jornadas sobre Historia de Estepa. La Época Contemporánea (11-14 abril 2002), Estepa, 689-711.
-	Juárez, J. Mª 
(1993a), “Intervención arqueológica en C/ Médico Ruiz, de Estepa (Sevilla)”, Anuario Arqueológico de Andalucía/1991, III, Sevilla, 521.
(1993b), “Intervención arqueológica en la C/ Saladillo de Estepa (Sevilla)”, Anuario Arqueológico de Andalucía/1991, III, Sevilla, 527-529.
(1997),"Excavaciones de urgencia en el Cerro de San Cristóbal. Estepa (1993). Corte A". Anuario Arqueológico de Andalucía/1993, III, Sevilla, 754-756. 
-	Juárez, J.M.; Cáceres, P. y Moreno, E. 
(2001), “Intervención arqueológica en el recinto del Castillo de Estepa (Sevilla)”, Anuario Arqueológico de Andalucía/97, III, Sevilla, 586-596.
-	León, P. (1998), “Los conjuntos escultóricos de Osuna”, Los Iberos. Príncipes de Occidente, Barcelona 228-232.
- Rodríguez Oliva, P (1996), “Las primeras manifestaciones de la escultura romana en la Hispania Meridional”, en Actas de la II Reunión sobre escultura romana en Hispania (Tarragona, 1995), Tarragona, 13-30.

Documentación Gráfica

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